Encanto sabatino

Hay grupos que están dotados del especial talento de crear canciones para reir, llorar o bailar. Canciones que lo mismo pueden acompañarte en un paseo doninical, servir de consuelo frente a una ruptura sentimental o animar una fiesta con luminosos estribillos. Los grupos que logran dar con esta mágica poción son una rara avis en un panorama actual en el se tiende, cada vez más, a la especialización estilística y emocional. Es más raro, en nuestros días, dar con una de estas bandas. Eso sí, cuando la encuentras el flechazo dura muchos años.


Saturday Looks Good to Me aparecieron un buen día en mi vida de la mano del siempre querido pintor Secundino Hernández, quien me los recomendó con su habitual vehemecia asegurándome que sus discos cambiarían mi vida. Y, la verdad es que la asombrosa mezcla de sonido Motown, ecos spectorianos y psicodelía contenida en sus primeros LPs me llenaron de asombro al instante. La dulzura inmensa, las melodías preciosísimas, la perfección de un pop que suena a todo sin sonar a nada en concreto, quedaron grabadas en mi memoria. Desde entonces vuelvo a discos como Saturday Looks Good to Me, Love will find you ó All your summer songs (Polivinyl, 2003) cada muy poco tiempo y revivo el asombro inicial que me produjeron.





Escuchando estos discos, no me cabe duda alguna acerca de la maestría de Fred Thomas y su pléyade de músicos de acompañamiento. Cualquiera que preste una atención mínima a sus canciones quedará hechizado por sus encanto. Los suyos son discos insólitos, llenos de singles y canciones redondas que pueden, ya digo, acompañarle a uno en el día más feliz o en la noche más triste de su vida. Como ha sucedido siempre con las grandes canciones de pop, por otra parte. Un grupo inmenso que, por alguna razón que no acierto a comprender, no ha llamado la atención de los grandes sabios pop de nuestra tierra; ni sus discos han tenido disfusión alguna, ni han merecido menciones en blogs (con la excepción de la sagaz Marta), ni nada de nada.




Por eso, me alegra saber que el grupo se ha convertido en el fichaje estella de la discográfica K Records, a la que se sigue con tanta devoción en nuestros diferentes entornos alternativos. El sello de indie-rock calvinista por excelencia lanza el próximo mes de septiembre el disco Fill Up The Room. A ver si empezamos a ponerles en el mapa ahora que (¡por fín!) tienen una discográfica de lo más cool.




Además, podremos disfrutar pronto de su directo en la ciudad de Madrid. Esto último, que parecía impensable hace unos meses, se hará realidad gracias al empeño en seguir ofreciendo conciertos de calidad por parte de los responsables del Neu! Club y su bendita cabezonería. Así, el próximo día 19 de mayo podremos verles en el escenario que más alegrías nos ha dado en este último año. Tocan también en Valencia y Barcelona. Las fechas están en su espacio.


Meet me by the water

The girl's distracted