08 octubre 2005

Odia a los grupos modernos sobre todas las cosas

Noche de fiesta en la Sala Siroco; la presentación del single autoeditado de Margarita (Atch!), sirve de excusa para conocer dos nuevas sensaciones, una pop y otra rock e inaugurar el otoño en este Madrid Terminal que algunos (los de siempre) ven exultante de creatividad. Bicicross y Margarita, los grupos en cuestión son un buen ejemplo de cómo, las más de las veces, el deseo tiene poca o ninguna mella sobre la realidad.
Con una formación peculiar compuesta por teclados, armonio y guitarra Bicicross se presentan como la gran esperanza del pop actual. Y bueno... ¿qué vamos a decir? Para los que hayan podido ver a J.Irizar toca la Batería, esta afirmación no es completamente cierta. De hecho, los barceloneses ganan en canciones, candor y actitud a pesar de lo cual Bicicross son un grupo a tener en cuenta. ¿Las razones? La primera, por lo irracional de su presentación en Madrid: tres canciones, cinco minutos, sonido malo de un grupo que no sabía como tocar sus propias composiciones. Un punto a su favor. En segundo lugar una actitud completamente indiferente e incluso vandálica: no suena, me bebo una cerveza, saludo a mis colegas, es pop pero me da lo mismo que quede bonito. Uno se imagina a los Boyracer presentandose de esa guisa en algún pub de Bristol... En tercer lugar, las canciones eran bonitas a pesar de todo, tenían arreglos misteriosos y buenas melodías. Poco más se puede decir de diez minutos de grupo.
Mucho peor ha sido lo de los Margarita. Un grupo que se puede englobar en esa escisón de la escena hardcore a la que le ha venido a ver la vigen del afterpunk en forma de un sota-caballo-rey de guitarras cubistas, acordes oblicuos, ritmos funk y caña punk. Y la cadenita, y la carrera de músico profesional, las dos cosas colgando de un bolsilo, tampoco vamos a olvidarnos de ello. Es decir, otra vez un grupo de (no tan) jóvenes semi-profesionales apostillando lo ya dicho por los Gang of Four o los Fire Engines. Y, si me apuran, por los Veracruz (otros hardcoretas de provecho, por cierto).
Margarita tienen dos problemas, a tenor de lo visto esta noche. El primero una ausencia absoluta (tómese en el sentido literal del término) de canciones, lo que reduce su propuesta a una sucesión de arreglos que se sostienen a duras penas en el vacío. El segundo es que su exceso de eficiencia hace que todo parezca impostado, un escamoteo de la "experiencia punk verdadera" (si es que tal cosa existió alguna vez) con todo lo que tiene de esponánea, imprevisible e irregular. A muchos les parecera un cosa bien moderna, bien cool, bien nueva... A mi me dejan con el primer LP de Au Pairs, tan tranquilo, y sigo diciendo que esta nueva escena (y no tan nueva, que llevan dos temporadas intentando colárnosla) me parece un soberano fraude orquestado por desalmados y caraduras.
Empieza, en resumen, el otoño, una estación de conciertos, lluvias y maledicencias. Y mientras llega la primera edición del Ladyfest España, podemos testar el nivel de confusión de la cultura underground. La primera impresión es que está sumida en una crisis de identidad extraña, no tanto por contar con una oposición cultural dominante desde el etorno mainstream sino por haber experimentado una desconcertante desercion voluntaria de buena parte de su base juvenil. Más que una rendición, un inexplicable desistimiento. ¿El rock ya no es el vehículo? es muy posible (las fórmulas mágicas no funcionan siempre)
En este contexto hay tres tipos de grupos: los que lo tienen muy claro, siguen adelante con lo suyo y obran en consecuencia, sin importar los efectos mercantiles y culturales que esto conlleve; los que oyen campanas,no saben donde, y obran a la buena de dios y, en tercer lugar, los que van leyendo el signo de los tiempos, siguen los hypes y examinan lo que está in y lo que está out y, con gracia y no exentos de cierta artesanía, lo facturan para su consumo, general o segmentado. Bicicross estaría en el segundo grupo y Margarita, por decirlo de manera elegante, no estaría en el primero.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

A ver. En primer lugar me parece bien que no te gusten ninguno de ambos grupos, que para gustos están los colores, como se suele decir(aunque a mí Margarita me encantan). En segundo lugar, decir que bicicross no se presenta como la gran esperanza del pop actual, porque eso sería una gilipollez. Eso te lo has sacado tú de no se sabe donde. Además, era nuestro primer concierto como grupo y para algunos, el primero en su vida. Sonó mal, de acuerdo y no sabemos tocar ni cantar, vale. Pero, por dios, actuamos como 20 minutos y tocamos 8 canciones, tu que concierto viste macho? En fin, que sepas que no vamos de nada ni nos metemos con nadie, pero para darte cuenta igual tienes que hablar con nosotros en vez de sacar conclusiones raras en sitios raros. Ni siquiera hemos pasado de salir mencionados como reseña de concierto en alguna revista gratuita, ni hemos hecho entrevistas y solo hemos grabado 4 canciones, así que no somos ninguna esperanza de nada ni de nadie. Solo lo hacemos porque lo pasamos muy bien. Espero que tú también disfrutes si vienes a vernos otra vez. Por cierto, mola tu blog.

Karpov Shelby dijo...

Estimado anónimo a mi Bicicross esta vez que narro no me disgustaron en absoluto. Vandálico es en sentido laudatorio. Ya digo que yo sólo he visto a Bicicross en esa ocasión y la locura y el desparpajo en escena me gustaron. La comparación con los también delirantes pero deliciosos Boyracer lo dice todo ¿no crees? Es cierto, solo vi tres canciones. impuntualidad del blogger; palito que me merezco por bigmouth.

Las dos veces siguientes que habéis tocado en madrid no he podido pasarme. Pero ganas no me han faltado nunca. Ya digo que en esas tres canciones vi buenas melodías y mucho potencial. Mejor que Margarita, que me pareció que adolecían de una alarmante y alambicada falta de canciones...

Tampoco me importaría conseguir el CD que presentastéis el otro día en Siroco. Porque ya digo, se nota que lo vuestro es diversión sin dobleces y eso, a estas alturas, os hace potencialemente más que interesantes. Además, haceis versiones de John Cale lo que demestra un buen gusto no exento de quijotismo.

Anónimo dijo...

Yo, he estado, para bien o para mal, en más conciertos de Bicicross de los que me atrevo a reconocer. Y mira, no serán buenos, no lo son, ni van a destruir el mercado internacional a base de composiciones poco convencionales, para eso ya está otra gente. Si voy a ver a esta gentucilla es, aparte de por la amistad que me une a ellos, porque cada día lo hacen mejor y es más divertido, porque no ponen caritas al público ni van de guays, ni hacen poses ni son peña pretendidamente virtuosa y, aunque se ponen nerviosos antes de cada concierto, cada día lo hacen mejor, y es la verdad. Me la suda si un pretendido crítico musical va por ahí dando palos, yo intenté ser músico media vida y nunca llegué a nada, solo por eso y por ver como gente con una idea diferente es capaz de salir al escenario y tocar con ceniceros, un armonio y secuenciar algunas cosas que se salen de lo común... pues tio merece la pena. La próxima vez no vayas al concierto 5€ que te ahorras y más sitio pa respirar, que el último estaba petado y no se cabía. Yo seguramente vaya.

Un saludo

Karpov Shelby dijo...

Querido anónimo,

para más información te recomiendo que leas los siguientes posts en este mismo blog:

Aquí (26 de abril de 2006) hablé de la maketa, que me encantó. Y convirtió a BC en uno de mis grupos favoritos de ahora.

http://karpov-agit-prop.blogspot.com/
2006/04/bicicross-hablando-de-cosas-raras.html

En este otro post (15 de octubre),
http://karpov-agit-prop.blogspot.com/
2006/10/entrando-en-territorio-comanche.html

volvía a alucinar con uno de sus últimos conciertos y lo decía bien clarito.

A lo mejor en este primer post la cosa no quedaba clara, pero amigo anónimo, no encontrarás a nadie que se haya esforzado mas en hacer ver al mundo lo buenos que son los Bicicross. Y sin conocerles de nada, además.

Un saludo y ya nos veremos en el próximo concierto.

Ya dije que iría y pedí a todo el mundo que hiciese igual.

Saludos