06 septiembre 2006

Mundos paralelos, entidades locales


Ya lo había comentado de pasada en alguna ocasión, el disco nuevo de Scarlett's Well es fabuloso. Durante el verano, he estado a caballo entre la realidad y el dulce poblado de Mousseron, ideado por BID como escenario de sus victorianas incursiones musico-literarias y he podido disfrutar de sus nuevos parajes. Porque, la verdad es que en esta localidad imaginaria, pequeño universo donde se desarrollan las canciones de Scarlett's Well, la llegada de nuevos habitantes ha venido que ni pintada.



Más frescura, canciones más directas y matices inesperados en la propuesta capitaneada por el inconmensurable BID. La entrada de un grupo fijo, en sustitución de los consabidos músicos de estudio, ha supuesto un inesperado renacimiento que demuestra que el enigmático y principesco truhán todavía es capaz de ejercer de inquieto fákir, caminar sobre brasas y hacer acrobáticos e inesperados juegos malabares. Esta vez, además, podremos comprobar con nuestros propios ojos el alcance de sus fantásticas proezas. Una gira española nos brindará la ocasión de saber si, lo de este indómito avatar, es sólo mero ilusionismo o si el orfebre hindú realmente ha conseguido el concurso de Brahma para eludir el Kali Yuga artístico hacia el que parecía dirigirse sin remedio.


El primer motivo de esperanza ya lo atisbamos hace algún tiempo: el disco en directo
The Unreal (Siesta, 2005) nos mostraba a un BID juguetón, mistérico e incestuoso que se atrevía a dar forma a una suerte de citas a ciegas musicales (recordemos que en este disco se documenta su experiencia en varios países tocando con músicos locales con los que apenas había ensayado más que para probar sonido). Ahora, Black Tulip Lips (Siesta, 2006) nos presenta unos Scarlett's Well capaces de soltar lastre conceptual, de deshacerse de las plúmbeas ataduras de su propia irrealidad para, tomar nuevo cuerpo y reencarnarse en un estadio más sabio, sobrio y elevado. Es cierto, el medido proyecto ya había ofrecido momentos inolvidables, reflejos de fantasía sin igual (sobre todo el mágico e iridiscente Strange Letters de 1999). Pero, como sucede en todas las pequeñas localidades, la rutina había empezado a acumularse en las calles de Mousseron y el tedio dejaba entrever sus garras tras los visillos de los cottages.




Scarlett's Well es, en estos días, todo un grupo (con ilustres judíos errantes, como Peter Momtchiloff, en sus filas) en el que BID puede dejar que la levedad le posea y eleve su propuesta hacia nuevos cielos más claros. Londinenses forasteros y deshinibidos parecen haber hecho suya la tierra de los sueños del ex-líder de los Monochrome Set. Rey destronado que, despojado de su cetro, no sólo se deja llevar sino que muestra una mayor tendencia al funambulismo.
Black Tulip Lips es como un sueño ligero o como un reflejo; equilibrado, breve, armonioso y particular. En fín, pleno de canciones maduras y sabrosas, como quien dice. Todo un filtro capaz de sumir al oyente en un evanescente e irreal estado de gracia.


Pero las noticias fabulosas no terminan aquí. De hecho, eso es sólo el comienzo. El hombre sin sombra, el extraño humanista capaz de idear joyas, cuentos y tonadas, dirige sus pasos hacia nuestro peculiar país. Como digo, los que quieran comprobar si estas gracias fonográficas son algo más que vahos en el fondo de un espejo, tienen ya cerradas fechas de aparición, escenarios, cuevas noctámbulas, encuentros concertados... En concreto, en estos lugares:


Cabaret Club@Sidecar, Barcelona: Jueves 14 de septiembre

Moby Dick Club, Madrid: Viernes 15 de septiembre


Lemon Pop Festival, Murcia : Sábado 16 de septiembre



Y, en el caso de que se produjese,
¿van a perderse la revelación? De todas maneras, tampoco se preocupen. Que, tanto si se da como si no, ya se la cuento yo desde este, su boletín.




10 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Nadie dice nada? Pues, hala, me lanzo: ¡este disco la releche!

Anónimo dijo...

La verdad es que había perdido el interés por Scarlett's Well después del tercer disco. De hecho ni conocía ese disco en directo.

Volveré a estar atento con estu nuevo disco.

Saludos,

Karpov Shelby dijo...

A mi me pasó lo mismo, Manuel. El primer LP me parece una verdadera joya, pero poco a poco se fue cayendo en esa sensación de que "da igual tener el tercero, que el cuarto..." tan mala y tan común en estos grupos "de concepto".

Si embargo, el directo me pareció fabuloso (a la altura de algunos de los mejores momentos de señorío musical de los Monochrome Set)y con este último LP me he reconciliado con BID de manera definitiva.

Consideraciones aparte, la oportunidad de ver a una leyenda de este calibre sobre un escenario es tentadora, te guste más o menos lo que hace ahora.

Anónimo dijo...

Oye, no viene mucho a cuento, pero quiero dejar constancia: creo que te van a molar las Rough Bunnies. Y no sólo porque sean una joveznas suecas. Nos vemos tunait. Salud!

Anónimo dijo...

Sí que molan las Bunnies. Son amigas de Ros ¿no?

Anónimo dijo...

Amigas virtuales, del myspace y eso... In person son amiguetas de Emma, que las vio en Estocolmo este verano. Yo os veo esta noche en O Compañeiro, compañeiro.

Anónimo dijo...

Glups! no sabía que los Scarlet's Well tubieran un disco en directo. ¡Y menos que tocaran en Madrid!

Karpov Shelby dijo...

¿Nadie sabía nada de lo del live de los Scarlett's Well? Curioso, pues de verdad que no está nada, nada mal. Lo de las Rough Bunnies estas lo miro.

Anónimo dijo...

bueno, bueno, que maravilla de concierto el de Barcelona!!
Encantadores Bid y sus 5 chicas, fabulosas! especialmente la cantante Alice Healey, guapísisima!!
Creo que su último disco no difiere mucho del resto, a mi me encantan todos, soy fan y reivindico a este gran grupo que nunca llevarán a sumercases-fibs y demas choteras "alternativas"

Anónimo dijo...

Saludos:
Soy uno de los 40 o 50 (qué vergüenza!) privilegiados que desafiando los elementos acudieron el pasado jueves al concerto en Bcn. Fantástico show, y era como verlos en el salón de tu casa; parece mentira que cupiesen 8 personas en el minúsculo escenario del Sidecar. Y qué guapa era la cantante.
Por cierto, Alice in the Underworld me parece un disco sublime, sin duda el mejor de los Scarlet´s y uno de mis preferidos de cuantos tengo.