31 diciembre 2005

Siguiendo la aurora boreal

Frescura, ingenuidad y melodía... el pop sueco renace de sus cenizas para satisfacción de los que rezábamos porque hubiese vida más allá de los Acid House Kings y The Legends. Dos microgrupos con unas pasmosas minicanciones aparecen de la nada para rompernos el corazón con sensibilidad, muros de guitarras jangly, melancolía y amores imposibles. Este es el sonido de nuestra vida, este el tic-tac que comunica el corazón y la cabeza. Si todavía te pondrías con orgullo una chapa de Red Sleeping Beauty empieza a mover el flequillo y preparaté para vibrar a más de mil revoluciones.

SOUTH AMBULANCE.- Una explosión de puro pop, un tortazo, un revoltijo de melodía, guitarras ecos y nervios (¿hace PUM tu corazón?) Eso es Hanging on a tie, regalo navideño colgado en la página de Labrador Records. Con un LP grabado para el emporio twee sueco, South Ambulance son la receta perfecta para curarse de la eclerosis múltiple que afectaba al reciente indie-pop de temporada. ¿Alguien se acuerda del vértigo de Don't slip it up de los Meat Whiplash? Desesperación y melodía, guitarras distorionadas, voces reberverantes y rítmos vertiginosas. Otras joyas fugaces, otros destellos para una historia secreta del pop, son Take them out, Die 5 times times 5. Urgentes, caóticos, ruidosos, afectados, efímeros... ¿Te acuerdas de la última vez que escuchaste una sola canción durante una hora seguida?


SAMBASSADEUR.- Decubiertos gracias a la recomendación del excelente blog-zine Fuck Me I'm Twee, Sambassadeur son unos Belle & Sebastian nórdicos, tangenciales, hipersensibles y quebradizos. Sentimentalismo extremo en la PRECIOSA Between the lines, sin duda la canción más bonita de este invierno. Pura sensibilidad indie que ilumina los rincones en los que refugiarse cuando la vida urbana se convierte en una pesadilla de tedio y terror. En otras ocasiones más cortantes (Whatever season), Sambassadeur encienden esas luces del norte que la nieve y el aburrimiento parecían haber consumido. Déjate mecer otra vez por palmas, guitarras tililantes y panderetas melancólicas... volverás a escribir en tu cuaderno I'm twee and I'm proud.

EL AVISO.-Pero no debemos olvidar que el pop es fugacidad ni que estos dos grupos nórdicos probablemente no resistan el deshielo. Tomen las palabras aquí depositadas como breves momentos de fiebre ante unas canciones leves capaces de encender por un momento una bengala en el ánimo. Son meras excusas para continuar con esa perpetua persecución de la magia pop, de esos tres minutos de fantasía en los que la realidad se suspende. No hay que olvidar que estas mini-estrellas son solo
luminarias menores, y pueden no ser más que destellos engañosos y traicioneros.

Y LA MORALEJA.- Y a pesar de todo, gran parte del interés de la vida consiste en perseguir una aurora boreal eterna que se nos escapará siempre más allá del horizonte, emocionarse con una canción, saltar y agitar la cabeza, sin más propósito que arañar unos
minutos de felicidad pura. Estas melodías solo ofrecen una promesa fugaz: que el corazón haga PUM! Un salto, un estallido, una chispa, un instante... ¿Te acuerdas cuando eso era lo único que deseabas?

1 comentario:

Anónimo dijo...

David Mimo es un mendrugo descafeinado.